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DEL PRÓLOGO Querido lector, querida lectora Alma ha llegado a tus manos por obra del destino. Si lees con el corazón, esta historia te guiará a conectar con tu esencia, a recuperar tu poder y a lanzarte a la realización de tus sueños. Alma es un nuevo inicio. Desde la oscuridad, la oportunidad de volver a la luz, de renacer. Un nuevo mundo. Una iniciación. Discípulos con fe. Maestros verdaderos. Un destino compartido. Una misión universal. Esta es una historia de superación, de luz, de amor. Porque la divinidad está en nosotros. Alma nos lo recuerda y lo despierta para que seamos libres. Queridos niños, niñas y jóvenes Sois la luz y esperanza del nuevo mundo, los líderes humanitarios de la nueva era. Alma ha llegado a vuestras manos por obra del destino, porque esta historia ha nacido para vosotros, para el niño y joven interior de todos, y para los adultos que os acompañan en el camino. En vuestro corazón tenéis un propósito de vida único, una fuente de luz infinita, un gran poder para realizar vuestra misión en el mundo. Si buscáis la llave de la verdadera felicidad, la encontraréis. Queridos adultos Si estáis leyendo estas palabras es porque también sois protagonistas de Alma. Esta es una historia dirigida a todos y a todas: a quienes saben que en esencia somos iguales y somos uno; a quienes se entregan por evolucionar y ofrecer lo mejor de sí mismos; a quienes contribuyen a dignificar las vidas de los demás; a quienes viven el sentido de la vida en la realización personal y en la colaboración por la felicidad del prójimo; a quienes predican el amor con el ejemplo; a quienes se lanzan al vacío de la incertidumbre y abrazan sus miedos para cumplir su misión vital; a quienes aún sufren, pero que un día verán el lloroso riego del dolor convertido en fruto de amor; a quienes se sumergen en el fluir de la vida; a quienes siguen los dictados del corazón; a quienes buscan, encuentran y siguen el camino de la verdad. Esta semilla ha nacido para recordar que somos hijos e hijas del amor, para ofrecer un espejo de luz a quienes viven en la oscuridad, para despertarnos y acompañar a otros en su despertar, para reavivar los ideales de los amantes de la paz y la libertad, para motivar a realizar los sueños del alma, para inspirar a seres que dejarán una huella eterna, porque su paso por la existencia lo habrán dado con amor. |